Lily, una carterista que se hace pasar por condesa, conoce en Venecia al famoso ladrón Gaston Monescu, quien a su vez se hace pasar por barón, y se enamoran. Gaston roba al aristócrata François Fileba y huye con Lily antes de que le descubran. Casi un año después, en París, Gaston roba un bolso con diamantes incrustados a la viuda Mariette Colet, pero se lo devuelve y la cautiva de tal forma que lo contrata como secretario.
Michael Brandon (Gary Cooper) es un millonario malcriado y mujeriego que ha tenido siete esposas, todas atraídas por su fortuna. En una tienda de la Riviera conoce a Nicole de Loiselle (Claudette Colbert), pero en un principio ella le rechaza. El caso es que Nicole, hija de una familia de nobles franceses venidos a menos, decide, a instancias de su padre, aceptar finalmente la proposición de matrimonio de Brandon, pero deja claro que lo hace sólo por su dinero.
Para evitar que le dejen en la sección de obituarios -a donde fue enviado como castigo-, el corresponsal del Morning Star, Wallace Cook (Fredrich March), convence a su jefe Oliver Stone (Walter Connolly), para que lo deje ampliar la noticia del envenenamiento por radio que se dice sufrió una mujer de Warsaw, Vermont, llamada Hazel Flagg (Carole Lombard), y queriendo sacar provecho del caso, la mujer es traída a Nueva York con la venia de su médico, y tras publicitar ampliamente su caso para despertar la sensibilidad del pueblo... una buena sorpresa se les tiene guardada.
Oscar Jaffe (John Barrymore) es un dramaturgo y director teatral de Broadway que goza de gran prestigio, pero que tiene un carácter insoportable. En uno de los castings conoce a una joven actriz llamada Mildred (Carole Lombard), a la que escoge como protagonista de su obra. La rebautiza con el nombre de Lily Garland, que resulta mucho más comercial y llamativo. El estreno es un éxito de crítica y público, y la actriz se convierte en una estrella de Hollywood.